La instalación de mantas térmicas en los sistemas domésticos de recepción por satélite permite mantener la recepción de la antena incluso en invierno, cuando las bajas temperaturas pueden provocar la formación de hielo o la acumulación de nieve en la superficie de la antena, afectando su funcionamiento.
La manta térmica puede aplicarse durante la instalación de la antena parabólica o posteriormente, y una vez montada no requiere mantenimiento especial.
El sistema de calefacción se activa cuando las temperaturas son bajas, para evitar la formación de hielo en el disco y en el iluminador.
